Seúl: funcionarios norcoreanos regresan a oficina de enlace

SEÚL, Corea del Sur (AP) — Algunos funcionarios de Corea del Norte regresaron a la oficina de enlace intercoreana el lunes, tres días después de que Pyongyang retiró de forma abrupta a todo su personal citando instrucciones no especificadas de “autoridades de alto nivel”, dijo Corea del Sur.

No quedó claro de inmediato el motivo por el que el Norte envió a algunos de sus empleados de regreso a la oficina ni si hará lo mismo con el resto del personal. La decisión de Pyongyang del viernes se produjo una semana después de que su viceministro de Exteriores amenazó con retirarse de las negociaciones nucleares con Estados Unidos tras el colapso de la última cumbre nuclear entre Kim Jong Un y Donald Trump, celebrada el mes pasado en Vietnam.

Entre cuatro y cinco funcionarios norcoreanos se presentaron a trabajar el lunes en la oficina de enlace ubicada en la ciudad fronteriza de Kaesong, en el Norte, y dijeron a funcionarios surcoreanos que iban a cubrir sus turnos habituales, explicó el Ministerio de Unificación de Seúl, que se encarga de los asuntos intercoreanos, en un comunicado.

Pyongyang aún no explicó los motivos por los que retiró a su personal, agregó el ministerio, que se mostró esperanzado porque el avance del lunes pueda permitir que la oficina cumpla su “función esencial”. El Norte había estado enviando a unos 10 trabajadores por jornada desde la apertura del centro el pasado septiembre, dentro de los esfuerzos hacia la reconciliación entre las dos naciones rivales acordados por Kim y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in.

Algunos analistas señalaron que la iniciativa norcoreana buscaba presionar al Sur para que respalde su posición con Estados Unidos con más firmeza tras el fracaso de la cumbre entre Trump-Kim en Hanói. Medios estatales norcoreanos pidieron recientemente a Seúl que se aleje de Washington y reanude los proyectos económicos conjuntos paralizados por las sanciones estadounidenses a Pyongyang.

En los últimos meses, las Coreas han desmantelado algunos de sus puestos de guardia fronterizos, suspendieron las maniobras militares junto a la frontera y prometieron reanudar los proyectos económicos intercoreanos cuando sea posible, mostrando optimismo acerca de una posible retirada de las sanciones internacionales.

Washington y Pyongyang han tenido discrepancias sobre el desarme nuclear del Norte y la retirada de las sanciones estadounidenses, y se culpan mutuamente del colapso del diálogo de Hanói.